martes, 13 de octubre de 2015

Las profecías autocumplidas.

Voy a hacer varios cambios en el blog independientemente de lo que salga en la encuesta (de la que por cierto estáis pasando). Os comento: en primer lugar la foto nueva que veis no es la portada sino una especie de foto promocional que hice esta semana. También os quería decir que esto no pretende ser un daily porque reconozco que sería incapaz de actualizarlo cada día pero sí que me gustaría que, como mínimo, hubiese un post por semana sobre los temas que en ese momento me parezcan importantes e incluso si vosotros queréis que de mi opinión sobre alguno en concreto. Por último pero no menos importante me gustaría daros las gracias por la buena aceptación que ha tenido #CuestionDeMinutos y os pediría que tanto si seguís asiduamente este blog como si es la primera vez que os pasáis (si es así bienvenido/a a mi pequeño e incoherente mundo) me ayudéis a difundirlo por las redes sociales, un simple RT al tweet con la dirección que os ha traído hasta aquí me ayudaría un mundo.

Y no podía acabar esta entrada sin mi pequeña y ya típica reflexión:
Hoy ha sido un día tan cargado de obligaciones que no ha sido hasta hace un rato que no me he enterado de que estamos a martes 13 (felicidades a los Eduardos). Es posible que hayas tenido un mal día o que, al igual que yo, tú también vivas en babia y tampoco te hayas enterado pero si te identificas más con el primer caso quizás pienses “sabía que hoy no tenía que haber salido de la cama, es martes 13” y en ese caso es posible que estés siendo víctima de lo que se conoce como “Profecía Autocumplida”. Este concepto viene a decir que si un día te levantas con el pie izquierdo y te pasa algo malo te parecerá lo peor porque estabas pensando en que iba a ser un mal día; otro ejemplo que quizás sea más claro es que una persona piense que va a suspender, se mentalizas de que ese examen no es lo suyo y que no se le dará bien, de esta manera comenzará a dejarlo un poco en el olvido hasta las vísperas del mismo, no da tiempo a estudiar e incluso pone excusas para no hacerlo ya que piensa que no servirá de nada y al final suspende, cumpliendo sus expectativas. No es que sea incapaz de aprobarlo o que sea menos inteligente que el resto, es algo mental, un proceso de autosugestión conocido en el campo de la psicología social con el nombre mencionado anteriormente.
Por lo tanto a dónde quiero llegar es que cuando tengas un mal día antes de agobiarte pienses en si lo que te ha pasado es realmente importante o es simplemente que has amanecido desanimado/a y cada cosa te parece un mundo. No le des tanta importancia a las cosas que ocurren antes de intentar solucionarlas, ese es mi consejo del día.

Sonríe.

2 comentarios:

  1. Esto es simplemente magnifico. Felicitaciones

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias. Sólo espero que estas pocas palabras puedan ayudar a mejorar el día de alguna persona. Gracias de verdad por pasarte y por dejar este comentario.
      Un saludo.
      Goat.

      Eliminar